Respeto. Lo pedimos para nosotros porque nosotros lo ofrecemos. Podremos ser mejores o peores en la materia. Habrá días en lo que la inspiración venga a pasar unos días con nosotros, y días en lo que la inspiración llegue y sin tomarse ni tan siquiera un café se marche. Habrá momentos de acierto con un encuadre, con un «click» o con un color. Sin embargo, esos momentos también se pueden convertir en un encuadre fallido, en un «click» a destiempo e incluso, en un color equivocado. Pero todos y cada uno de nuestros trabajos se basan en el respeto. El respeto a nuestra profesión/hobby, el respeto a las parejas que confían en nosotros y el respeto que nos tenemos a nosotros mismos. Lo demostramos cada día. Y estas fotografías de Iñaki y Beatriz en el Hotel Pamplona Catedral son eso, puro respeto. El que se merecen ellos y sus recuerdos, el que se merece el arte de la fotografía y el que nosotros mismos nos merecemos. Si nosotros mismos somos incapaces de respetarnos, nunca podremos ser respetuosos con el resto.